VESUVIUS ARDE

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Desde el periódico La Cuenca del Nalón nos han trasmitido este fin de semana toda su solidaridad a la situación por la que los trabajadores de Vesuvius en Langreo están pasando. Y desde aquí tanto los trabajadores como sus familias queremos darles las gracias por ello.
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"UN FUTURO SIN FUTURO" 2009

"UN FUTURO SIN FUTURO" 2009
ESTE ES EL FUTURO PARA NUESTRAS CUENCAS, UN FUTURO MUCHO MAS NEGRO QUE CUANDO TENÍAMOS LAS MINAS DE CARBÓN A PLENO RENDIMIENTO.
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miércoles, 5 de agosto de 2009

A contracorriente

Tristeza nacional

n La realidad negativa se observa directamente, brota en cada esquina y toda España está sujeta a esa garrapata llamada paro






CARLOS CUESTA La tristeza, ese estado emocional y anímico, se ha apoderado de muchos españoles. Hay muchos afligidos, compungidos, atribulados, doloridos y apesadumbrados por la preocupación de la situación económica actual. Y esta realidad negativa se observa directamente, brota en cada esquina, en cada portal comunitario, en cada terraza hostelera, en las oficinas de empleo, en la panadería, en la tienda de ultramarinos, en el paseo fluvial, en la playa? Todo el entorno urbano y rural de esta España nuestra está sujeto a esa garrapata llamada paro, a ese momento de impotencia, de sinrazón, de búsqueda incierta de un trabajo para mantener al colectivo familiar, para sentirse útil a la sociedad, para consumir? en suma, para vivir dignamente y aportar ese canon impuesto para el erario público con el objetivo de mantener un Estado fuerte y solidario. España pasa por momentos delicados, de incertidumbre, y por ende, casi todas las comunidades autónomas, incluida nuestra Asturias, una de las más afectadas por esta lacra crítica de la falta de dinero y largo y oscuro desempleo.

La crisis coyuntural que ronda desde hace tiempo a todo el imaginario español se está reflejando en los rostros delicados, penosos y amarridos de muchas personas que, sin quererlo, sueltan esa imagen doliente que dice perfectamente lo que está ocurriendo en este sacrosanto país. La ligereza, la vivencia a todo trapo, la demanda de hipotecas para la vivienda, vehículo novedoso, las vacaciones y demás zarandajas, se está diluyendo como un azucarillo y el poco dinero que queda en las arcas de muchas familias se utiliza para fines de primera necesidad. Ese relajo de antaño, de país rico y cargado de solvencia monetaria se está acabando. Quedan todavía varios años, según algunos expertos financieros, para que la situación y los brotes verdes se enderecen y veamos la primavera feliz y colorista ante nuestros ojos. Lo que es el rostro en estos momentos es la significación de la derrota, de la impotencia y de la melancolía. Algunos todavía mantienen su estilo liberal de vida y se permiten bastantes lujos, pero la gran mayoría de compatriotas ya están inundados por esta recesión imparable y difícil de contener. Los autónomos, que son cantidad, están con el agua al cuello, muchos periodistas, así como otros sectores de la producción nacional lo están pasando francamente mal. El funcionariado, y demás que viven de los entes públicos, todavía caminan por senderos de tranquilidad y la renta familiar alcanza cómodamente a fin de mes. Las congelaciones salariales llegarán a estos trabajadores, los altos cargos políticos tendrán que rebajarse sus emolumentos y entre todos buscar el ahorro y apechugar durante estas inciertas y largas predicciones económicas.

Todo este tinglado político-financiero está influyendo en la vida cotidiana. Todo es mentar a la crisis, todo es anunciar la poca solvencia de las entidades bancarias, todo son aluviones de noticias negativas y preñadas de observaciones al ciudadano. La crisis está ahí, pero nadie la ve, nadie la palpa, nadie la desea y todos la mencionan como una amiga más, como una compañera de fatigas que nos rodea en nuestros encuentros tertulianos, en nuestro devenir. Lo cierto es que esta singularidad crítica está agobiando a mucha gente, la está convirtiendo en seres inanimados, sólo disponibles para la mendicidad familiar o callejera. Las cocinas económicas de toda España, los servicios sociales municipales, los organismos benéficos como Cáritas, no dan abasto y están redoblando esfuerzos por colaborar a favor de personas faltas de medios, de trabajo y que están en condiciones de atraganto social. Días pasados en Valencia y en Madrid, con motivo de unos encuentros sobre la Dieta Mediterránea y el turismo mediático respectivamente, lo comentaba con mis compañeros de comité director de la FEPET, la Federación Española de Periodistas y Escritores de Turismo. La tristeza se está adueñando de la gente. Falta vida, ánimo, condescendencia, afabilidad? El ambiente que nos acompaña está viciado, mustio y contrito. La indigencia se adueña de las estaciones, el metro, los aeropuertos. La gente sale a la calle e intenta disfrutar de los paseos y de las terrazas al aire libre de las aceras ciudadanas y villanas. Pero nada más. Apenas se compra, se mercadea, se consume. Y el turismo, nuestra primera industria nacional, comienza a resentirse después de décadas de bonanza y poderío en la balanza económica. La falta de turistas y de viajeros que han optado por quedarse en sus hogares o han preferido vacacionar a otros entornos de sol y playa más atractivos para sus bolsillos. Malos tiempos para todos. Habrá que pasar el verano colgados de esas palabras que denotan inopia, como escasez, desdicha y necesidad. Muchos compatriotas están metidos de lleno en ese rincón de la estrechez y el ahogo. No quiero ser derrotista, pero las alarmas sociales han saltado y sólo hay que viajar por esos barrios periféricos de nuestras ciudades para ver con ojos sinceros y nítidos lo que está ocurriendo. Y Asturias no se escapa de ese horizonte. La tristeza nacional nos acompañará hasta que esta tormenta financiera vea la luz de la calma y se aproxime el anhelado escampe. Ojalá sea pronto? Un abrazo solidario a los trabajadores de Vesuvius, que están viviendo la distorsión y contradicciones del mercado y el sistema internacionales.

http://www.lne.es/cuencas/2009/08/02/cuencas-tristeza-nacional/790137.html



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