Vesuvius en Langreo
http://www.elcomerciodigital.com/gijon/20090728/local/cuencas/sindicatos-empresa-acuerdan-evitar-200907281454.html
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AYUDA A LOS TRABAJADORES DE EMFERBUS
Desde la Asamblea de Trabajadores de AFEMA (Alicante), que llevamos varios meses en lucha por el impago de nuestras nóminas y contra la precariedad de los servicos que ofrecemos a personas con discapacidad, queremos hacer llegar nuestro más profundo apoyo y solidaridad a los trabajadores de la fábrica Vesuvius en Langreo y a los trabajadores del metal en Vigo. Ambos colectivos, al igual que nosotros, estan afectados por el ataque a sus condiciones de vida: amenazados todos por el cierre, los despidos, las EREs o la caida en picado de nuestras condicones de subsistencia, con la excusa de la crisis. En definitiva, todos atacados (toda la clase obrera) por un sistema de cosas que no tiene en consideración las necesidades de las personas.
Consideramos que pese a las apariencias, nuestras luchas parten de una misma comunidad de intereses, la defensa de nuestras necesidades, de unas condiciones de vida dignas para nosotros, nuestros compañeros, nuestras familias, etc, la defensa de nuestros intereses como clase trabajadora. Es esta perspectiva la que nos lleva a hermanarnos con todos los trabajadores en lucha, tratando de crear un espacio común donde extender la solidaridad entre los trabajadores, solidaridad que es nuestra arma fundamental.
En el (modesto) desarrollo de nuestra lucha hemos llegado a dos conclusiones que consideramos esenciales:
Que la lucha debe estar siempre dirigida por nosotros mismos, a traves de nuestras asambleas, nuestros comites, muestras movilizaciones, cuestionando siempre a intermediarios y profesionales ajenos a la realidad de los trabajadores.
Que la extensión de las luchas y la unión con otros trabajadores, es la única forma en que nuestra lucha concreta puede prosperar. Salir del marco impuesto de nuestra empresa o nuestro sector y tratar de acercarnos a las realidades de otros compañeros es el camino que nos puede llevar a algún sitio. Porque si la fuerza del estado, del patrón, del jefe, del sindicato es nuestra división, el individualismo, el asilamiento; la fuerza de la clase obrera es la unidad, la solidaridad, la comunicación.
Saludamos nuevamente la lucha de nuestros compañeros de Vigo y Lagreo y la lucha de todos los trabajadores esten donde esten, entendiendo que su lucha es la nuestra y esperando poder compartirla más allá de las palabras.
UNA MISMA CLASE UNA MISMA LUCHA
PLATAFORMA DE TRABAJADORES DE SERVICIOS SOCIO-SANITARIOS
Comunicado de la FGT Bélgica
Dans la céramique, l'annonce de la fermeture de Premier Refractories à Hautrage menace l'emploi de 75 personnes. Le groupe Vesuvius profite de l'aubaine de la crise, pour fermer un site rentable et bénéficiaire, afin de délocaliser la production vers des pays à bas coût salariaux et sociaux. En la cerámica, el anuncio de cierre de la Premier Refractarios Hautrage amenaza para el empleo de 75 personas. El Vesubio, aprovecha la oportunidad de la crisis, para cerrar un sitio rentable y el beneficiario, con el fin de trasladar la producción a países con bajos costes salariales y las prestaciones sociales.
ENLACES SOBRE LA NOTICIA
Vesubio se especializa en el diseño, ingeniería, fabricación y entrega de productos refractarios, sistemas y servicios de alta tecnología para aplicaciones industriales para el flujo de material fundido en la industria del acero. Vesuvius is a division of the London-based Cookson Group, a materials technology company. Vesubio es una división de la sede en Londres Cookson Group, una compañía de tecnología de materiales.
Los empleados de la empresa de materiales refractarios ubicada en el polígono de Riaño han cortado esta mañana los accesos a la fábrica y se han encerrado en su interior
27.05.09 - 20:08 -
EFE | RIAÑO
Protesta de los trabajadores de Vesuvius, hoy, en el polígono de Riaño I / J.C. ROMÁN
Los trabajadores de Vesuvius, una empresa de materiales refractarios ubicada en el polígono de Riaño I, en Langreo, han cortado esta mañana los accesos a la fábrica y se han encerrado en su interior para denunciar el cierre de la misma, anunciado a los empleados por los propietarios de la misma.
Vesuvius tiene actualmente 80 trabajadores, si bien llegó a disponer de 120 entre empleados de plantilla y contratados de forma temporal.
En diciembre del año pasado comenzaron los problemas laborales y los despidos, y a principios de año se firmó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que debería haberse extendido hasta marzo de 2010.
Sin embargo, y a pesar de las ayudas públicas recibidas, los trabajadores aseguran que la empresa ya les ha comunicado el cierre.
"No nos parece normal que, tras las ayudas que el Principado dio el año pasado, hayamos pasado de ser 120 a cinco turnos, a echar gente y a cerrar la planta", ha denunciado uno de estos empleados.
Según los propios trabajadores, la empresa les propone el cierre de dos años de la planta langreana y una recolocación para los empleados, que estudiarán en asamblea esta oferta y las medidas a tomar en caso de rechazarla.
Los empleados de Vesuvius no descartan acometer en los próximos días medidas de presión más contundentes, incluidos cortes de carreteras, en el caso de que no obtengan una solución a su problema laboral.
Las protestas de esta mañana han consistido en la quema de ruedas y madera a las puertas de la planta, para impedir la entrada y salida a la misma.Vesuvius es una compañía multinacional con centros de operación en los cinco continentes, siendo fabricante y suministrador de materiales refractarios cuyo destino es principalmente el sector siderúrgico.
En noviembre de 1991 Vesuvius Ibérica, con la aprobación de Lloyd´s Register como organismo certificador, se erigió en la primera compañía de la comunidad autónoma asturiana certificada de acuerdo a la normativa ISO 9000. Dicha certificación, refrendada y mantenida a lo largo de los años, supuso y supone un importante pilar en el sistema de calidad que, desde entonces, tiene implantado la compañía. Ya entonces el que fuera director general de Vesuvius Ibérica y responsable de la factoría ubicada en Langreo, Valentín D. Junquera, fallecido prematuramente en 2001, declaraba que el mejor capital que tiene una empresa es su capital humano y que la labor de los equipos de trabajo es recompensada mediante el reconocimiento ante los demás del trabajo bien hecho. Idéntica filosofía de trabajo ha hecho que, a lo largo de estos últimos años, la mayoría de las expectativas que la empresa tenía en los inicios de la década anterior cuando se instaló en el polígono de Riaño, considerado como zona de urgente reindustrialización (ZUR), se hayan visto confirmadas e, incluso, superadas.
Estos días nos llegan noticias de los difíciles momentos que los trabajadores de esta empresa, con sede en Langreo, están pasando ante la decisión unilateral de cierre temporal de la misma. El temor ante la posibilidad de que se trate de un cierre definitivo, de que no exista un plan de viabilidad razonable o de la imposibilidad de que exista una posible rectificación ante una decisión que la empresa matriz ha tomado, previsiblemente apoyada en motivos financieros globales, siembra la inquietud ante este capital humano que una vez más ha demostrado su alta cualificación al seguir trabajando para cumplir con los compromisos adquiridos con los clientes en los plazos de entrega.
Esperamos y deseamos que los apoyos políticos que, durante estos días, están recibiendo estos trabajadores traspasen la barrera de la campaña a las elecciones europeas y que el Gobierno del Principado manifieste una postura favorable a los mismos.
Dolores Gutiérrez Álvarez
Oviedo
Desde hace diecinueve años trabajo en Vesuvius. Me paro a pensarlo una y otra vez y me doy cuenta de que estos años han transcurrido muy rápido, o quizá no.
Y es que yo, como muchos de mis compañeros, he crecido paralelamente a Vesuvius, nos hemos formado en la vida con Vesuvius y nos hicimos mayores junto a Vesuvius.
Llegué siendo un chaval, en el apogeo de la juventud, y me encontré con una nueva empresa que nadie, fuera de su ámbito, conocía ni sabía a qué se dedicaba; no era fácil explicar a mi familia y amigos qué era lo que allí se hacía; con el paso del tiempo fueron comprendiendo que hiciésemos lo que hiciésemos era algo importante. ¿Cómo llegaron a esa conclusión?, es sencillo: yo era feliz allí y eso era suficiente.
Los primeros años los recuerdo especialmente gratos; trabajábamos duro, apenas seríamos una docena de personas y había muy buena armonía. Dentro del proceso productivo hacíamos cosas relativamente sencillas no exentas de ser una novedad para nosotros y eso nos incentivaba aún más, teníamos ganas de aprender y de hacer las cosas bien.
Con el paso del tiempo aumentaron el trabajo y, consecuentemente, la plantilla.
¡Ya se trabajaba a dos turnos! ¿Seríamos capaces de asumir este nuevo reto? La respuesta nos llegó con la Certificación de Calidad ISO 9000, y premios a la «Calidad empresarial».
Se hicieron importantes inversiones en la empresa de manera que se aumentó su capacidad, crecíamos y empezamos a trabajar a tres turnos, ya éramos unos cincuenta. Se conseguían nuevas certificaciones en Medio Ambiente ISO 14000 y en Seguridad OSHAS 18000. Éramos la primera empresa asturiana en obtener todo esto y nosotros mismos nos dedicábamos orgullosamente a pregonarlo en todos los ámbitos. Mientras tanto, por supuesto, seguíamos con nuestro buen hacer y trabajo.
Durante este tiempo, unos hemos creado nuestra propia familia, otros se han retirado, y alguno, desgraciadamente, ha fallecido; todos hemos sido parte de Vesuvius y Vesuvius ha sido una parte muy importante de nuestra vida.
Nuestra gran duda, de cumplirse los malos augurios que nos rodean, es ¿cómo será «todo» ahora?
Juntos hemos envejecido, nadie lo cuestiona, pero ¿19 años de existencia son suficientes para finalizar una vida? No, rotundamente no. En ningún caso.
http://mas.lne.es/cartasdeloslectores/carta/1404/vesuvius-vida-paralela-corta.html
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